Pros y contras de la diferencia de edad con la pareja
Al relacionarnos afectivamente con otro intervienen más aspectos inconscientes que conscientes. Algunas personas piensan que nos enamoramos de quienes se nos asemejan mucho en lo esencial; sin embargo, pueden existir marcadas diferencias de edad, cultura, poder adquisitivo o experiencia, que dan paso a las llamadas relaciones asimétricas.
Por su naturaleza, las relaciones asimétricas requieren que desarrollemos el amor de una manera distinta. Al principio estas diferencias pueden resultar poco importantes, pero si las ignoramos, con el paso del tiempo pueden convertirse en un problema. El conferencista Carlos Fraga explica que hay asimetrías que pueden superarse y otras que no, en el primer grupo entran factores como el grado de instrucción o el poder adquisitivo, y en el segundo, la edad. En todo caso, el motivador subraya la importancia de no disfrazarlas sino hacerlas presentes a través de la conversación y los acuerdos para poder vivirlas sin padecimientos.
Actualmente, la sociedad continúa imponiendo restricciones a la forma de relacionarnos. La diferencia de edad entre los miembros de una pareja no solo tiene lapsos recomendados sino incluso determinaciones acerca de cuál género debería ser mayor. Aún hay especialistas que sostienen que la distancia de edad ideal entre una pareja es de 5 años, siendo, por supuesto, el hombre mayor que la mujer. La principal razón que argumentan es que las féminas alcanzan la madurez emocional mucho más temprano que los caballeros.
Ahora, ¿qué sucede cuando entre los enamorados hay una brecha de 10, 15, 20 años o más?, ¿están destinados a separarse? El psicólogo Antonio Bolinches sostiene que si el hombre es hasta 10 años mayor que la mujer no hay problema, pero si a esa distancia le añadimos una década más, 20 años de diferencia, se produce un salto generacional que la sociedad repudia. Adicionalmente, según comenta el especialista, si el miembro mayor es la mujer resulta peor, salvo que ésta ostente poder en alguna de sus formas: riqueza, fama, renombre.
En conclusión, las parejas con edades muy desiguales tienden a generar rechazo social, pero no por ello dejarán de existir.
Tipos de parejas asimétricas
Economía y juventud: El psicólogo Esteban Cañamares sostiene que existen personas con grandes diferencias de edad que se relacionan por interés económico (generalmente en el caso de ella) y el deseo de rejuvenecer (generalmente en el caso de él). El también sexólogo asegura que no siempre esto ocurre y que más que pareja se trata de una unión por contrato mercantil.
Madre y padre: Cañamares nos recuerda los mitos griegos de Edipo y Electra al explicar la búsqueda de los hombres de elementos de su madre en la pareja y en el caso de la mujer aspectos paternos. Advierte que esto no se torna patológico en la medida en que la actitud maternal y paternal no sea rígida, sino por el contrario, es confortante para ambos una mujer cuidadora y un hombre protector.
Atracción y compatibilidad: en el último grupo el especialista ubica a quienes se aman y entienden bien y construyen una relación estable, sin obsesionarse por la marcada diferencia de edad.
Surge entonces la pregunta: ¿qué busca un hombre en una mujer más joven y qué espera encontrar una mujer mayor en un hombre menor? La sexóloga Delfina Mieville apunta que con frecuencia «el varón mayor busca sentirse más joven y poderoso y una representación de éxito social, mientras la mujer joven puede buscar una figura paterna o una estabilidad mayor o incluso una madurez que no encuentra en sus coetáneos». Con respecto a la fémina mayor, explica que a partir de los 45 años tiene la necesidad de reafirmarse a través del deseo de conquista, lo cual aumenta su autoestima. La también socióloga aclara que no en todos los casos ocurre lo mismo.
Mieville enumera los factores que por lo general se presentan en este tipo de relaciones:
- Miedo de la mujer a relacionarse con hombres de su edad.
- Deseo de ellas de vivir una etapa juvenil insatisfecha.
- Necesidad del hombre de revivir la etapa de cuidados maternales no satisfechos.
- Urgencia de ambos de dirigir sus deseos sexuales hacia personas viables.
Por lo general, las parejas en las cuales la mujer es mayor tienden a esconder su relación por miedo al “qué dirán”, también es frecuente que las presiones del entorno inmediato generen miedos e inseguridades que afectan la solidez del vínculo. Asimismo, es habitual que la mujer entre en competencia con otras más jóvenes y surjan los celos.
En cuanto al hombre mayor, las estadísticas indican que a partir de los 50 años experimenta la sensación de vejez y busca rejuvenecerse al lado de alguien menor. Todo ello, por supuesto, será válido para personas con necesidades psicológicas no resueltas; sin embargo, quienes no tienen ese problema suelen sentirse atraídos por alguien mayor por su personalidad, sabiduría, seguridad económica y experiencia.
Los pro de la diferencia de edad con la pareja
Aprendizaje constante: en este tipo de relaciones siempre habrá uno con un mayor caudal de experiencia con respecto al otro, lo que hará que el segundo se mantenga en una instrucción diaria que puede ayudarlo a potenciar los aspectos de la vida en común.
Distintos puntos de vista: la diferencia de edad hace que cada uno vea la vida de una manera diferente, si se logra trabajar esto a través del diálogo y la comprensión sin duda ambos abrirán su mente y complementarán sus modos de ver el mundo.
Estabilidad: al sumar la sabiduría de la madurez con la energía de la juventud se obtendrá un equilibrio muy positivo para la relación de pareja.
Mejor relación sexual: la veteranía del mayor aumentará la pasión de la pareja. El psiquiatra Juan Ariel Zúñiga indica que la mujer alcanza su mayor intensidad sexual cuando el hombre empieza a decaer (él entre los 18 y los 30, ella después de los 38) un hombre menor con una mujer mayor podrá coincidir en su apogeo sexual, en el caso de un hombre mayor que la mujer podrá compensarlo con la experiencia y suavidad en el trato.
Los contra de la diferencia de edad con la pareja
Celos: la persona con más edad suele temer la presencia de rivales más jóvenes, atractivos y con mayor capacidad sexual, por lo que el miedo a la infidelidad puede presentarse con mucha frecuencia. Claro que los celos tienen más que ver con la inseguridad que con los años.
Amigos y familiares: el tipo de amistades y los sitios que se frecuentan con ellos suele ser distintos en función de las edades. Muchas veces las parejas logran adaptarse a esto sin problemas, pero otras veces no y allí surgen roces con los amigos del otro. Asimismo, es frecuente que la familia rechace este tipo de uniones porque la nueva pareja tenga la misma edad de sus padres o hijos. Esto sin duda afecta la tranquilidad de ambos y a veces uno de ellos se ve en la necesidad de escoger entre la familia y la pareja.
Reloj biológico: el doctor César Lozano subraya que la mujer mayor que se relaciona con un hombre menor teme por el tiempo de fertilidad que le resta, mientras que la mujer joven que sale con un hombre mayor tiende a postergar la maternidad porque le parece pronto. Sin duda un punto importante que debe hablarse clara y honestamente con la pareja.
Posibilidades sexuales: si bien indicamos que el sexo era uno de los pro debido a que su calidad puede aumentar con la experiencia del amante que tenga más años, también podría considerarse un contra si nos centramos en el impulso sexual del hombre, que disminuye después de los 30, y la inviabilidad de ciertas posturas con el paso de los años.
Cómo enfrentar los contra de la diferencia de edad con la pareja
El psicólogo Esteban Cañamares resalta que lo más importante para enfrentar los riesgos de tener una pareja con mucha diferencia de edad es no ocultar la realidad sino hablarla y revisar aquellos aspectos que podrían tornarse problemáticos:
- Prestar interés genuino al otro.
- Adaptarse a su ambiente, amigos, estilo de vida por el simple placer de compartir con él o ella.
- Aprender a satisfacer sexualmente al compañero.
- Brindar seguridad afectiva al otro para evitar los celos.
Por su parte, el terapeuta Raúl Carvajal recomienda establecer acuerdos porque las reglas claras evitan conflictos:
- Conversar acerca de lo que necesita uno del otro y lo que esperan de la relación.
- Resolver los conflictos, no esconderlos ni postergarlos.
- Cuestionar lo que se busca en la pareja para no repetir los modelos disfuncionales de nuestros hogares paternos.
Finalmente, para que una relación de este tipo funcione se debe ser realista, no enfocarse en la diferencia de edad sino en lo cómodos que nos sentimos con nuestra pareja. Asimismo, debemos obviar las críticas y trabajar nuestra capacidad de adaptación.
No toda relación asimétrica está destinada al fracaso, al contrario, puede resultar una de las experiencias más gratas de nuestra vida, pero como toda relación requiere que hagamos un esfuerzo consciente en comunicarnos con el ser amado con quien compartimos valores, sueños, deseo y pasión.